Año nuevo

EL 2013 YA LLEGÓ ATRÁS Y EL LLEGA EL 2014. DEJAMOS ATRÁS DISCUSIONES, RISAS, LAGRIMAS Y ENCUENTROS. Y ESO ES LO BONITO DE LA VIDA DAR TODO E INTENTAR RECIBIR. LO VERDADERO BONITO ES VOLVER A CONFIAR Y VOLVER A EMPEZAR DE CERO. 
ESPERO UN 2014 LLENO DE ALEGRÍAS Y LLENO DE NUEVOS RETOS TANTO PERSONALES COMO PROFESIONALES. OS DESEO TODO LO MEJOR. 

MUCHAS GRACIAS POR LEERME Y DEJARME ESOS MARAVILLOSOS COMENTARIOS QUE ME DAN FUERZAS PARA SEGUIR.

PIDO PARA USTEDES SALUD, AMOR Y MUCHOS ORGASMOS.
DISFRUTAR !!!!!

Seguirme en face  que la información es mas actualizada.
Fanpage: Recuerdos de Florencia.

No se si lo he dicho pero el empiezo a emitir de nuevo el Viernes dia 10 de Enero.

Sorry :S

Lectoras mías lo siento muchísimo por no escribir ni subir capítulos. Os debo una explicación, lo sé.
Como ya sabéis no ando muy bien emocionalmente por cosas personales... Y con la navidad no ayuda. Os pido perdón y que paséis unas buenas fiestas. E día 10 de Enero vuelvo con esta historia.

 Os deseo lo mejor y lo siento muchísimo.


att: Rachel Nuñez

Navidad :)

Feliz Navidad a todas mis lectoras.
 Muchas gracias por seguirme en esta travesía. Al principio creía que no  iba a ser capaz de seguir esta historia y aqui estoy, después de casi 2 meses. Estoy contenta, gracias de corazón a todos vuestros comentarios y a todas por animarme.
De verdad mil gracias.

No va a ver parón, va a seguir adelante la historia. Espero que os vaya gustando como va acabando la historia (quedan aun unos 15 cap aún)

Felices Fiestas.

Feliz Navidad Y Próspero año nuevo. Sé Felices.

att: Rachel Nuñez.

Capítulo 13

Quien me iba a decir a mi, que yo, despues de haber sufrido tanto por un tio iba a volver a estar con él... Esto del enamoramiento es jodido. Si no lo hubiera estado no lo hubiera perdonado.
Nos hemos despertado tarde, bueno tarde para Lorenzo que se puso en plan bestia y se fue a a la ducha maldiciendo. No sé que tendrá preparado y le ha salido mal.
Estoy buscando ropa apropiada para salir, apenas son las 11 y media de la mañana y este loco ya me quiere llevar por ahí, a visitar Florencia.
Me pongo un vestido corto rojo y negro con unas mayas y con unas manoletinas negras, no tengo ganas de estar coja todo el dia. Prefiero ir cómoda. Mi pelo aún esta mojado de la ducha y decido alisarmelo como pueda.

Me miro al espejo, miro mi barrigota y sonrio. A
caricio la barriga con la mano y un escalafrío entra por todo mi cuerpo. Tengo ganas ya de verle la carita.  Aún no se lo diré a Lorenzo, quiero que sea especial, cuando me de lo que me tiene que dar se lo diré, para que vea que yo tambien puedo impresionarlo. Espero que se lo tome a bien, si no... no se que pasaría. Una cosa tengo clara, no voy a abortar.  ES mi hijo, sangre de mi sangre. Y esta dentro de mi, es parte de mi y nada ni nadie va a hacer que yo me deshaga de él.

- Bellisima-Me llama- pásame la toalla
Pongo los ojos en blanco este Lorenzo como siempre tan despistado. Le llevo al baño la toalla y me entran una naúseas horribles y tengo que vomitar. Lorenzo esta asustado con mi reaacción y se preocupa, salta de la ducha y se pone a mi lado.
- Bellisima, ¿Qué te pasa? ¿ Has comido algo que te ha sentado mal?- Me toca la espalda mientras mi cabeza esta por encima del vater.
En lo mas profundo de mi quiero decirselo ya, pero no puedo, aún no.
- Si no bebiste nada de la botella ayer,querida deberiamos ir al médico.
- ¡Ay lorenzo que exagerado eres! Me ha sentado mal una chocolatina que tenia en el bolso eso es todo.- Pongo cara de disimulo, parece que me cree. Que facil es engañarlo... Este es tonto.
-Cariño, hoy sere tu guía turístico, te voy a llevar a un par de sitios, espero que te guste y mañana te doy tu sorpresita.
Nos montamos en su coche y deja atrás su casa. Veo como todo me da vueltas, cierro los ojos y suspiro. <<Solo es el primer trimeste vamos Amanda>> Me doy ánimos a mi misma.
- ¿Estas bien?- Me pregunta mirandome.
- Lorenzo no desvies tus ojos de la carretera y solo estoy un poco mareada, es por el coche es normal.
- Si quieres nos vamos a casa y descansas- Se ve un poco preocupado.
- Lorenzo, cállate y sigue conduciendo.- ¡Que mal humor!,¡ Que borde he sido! Pero mira quee es pesado el pobre.

Enseguida pone sus ojos adelante y conduce hasta llegar a un aparcamiento.
-Hemos llegado, hoy no necesitamos más el coche hasta que nos vayamos  a casa. ¿Estas preparada para patearte una parte de Florencia?
- Si es contigo,hasta el final.
Me sujeta de la mano y me lleva hasta una gran plaza, miro alrededor, todo esta atestado de gente, con bolsas en sus manos, todo lleno de turistas.
¡Que agobio! Lorenzo lo único que hace es enseñarme cada monumento que hay y yo asiento sin escuchar. ¿Se cree que me importa esto? Yo le asiento y le sigo porque le esta haciendo ilusión, si fuera por mi estaria dentro de las tiendas...
-Mira Amanda esta se llama la plaza de la Signoria, y es la plaza más importante y visitada de Florencia.

- ¡¡No me digas!!, No veo a la gente- le digo irónicamente.
Me saca la lengua en modo de contestación.
- Muy graciosa madrileña.- Se me acerca y me da un beso en la cabeza.
-¿Tienes hambre? - Me pregunta.
-Si, mucha ¿Y tú tienes sed?
- ¿Sed?- Me pregunta confundido, enarcando una ceja.
- Si hijo, no has parado de hablar en todo  el rato.
Se rie.
- Bueno, como se ha levantado hoy la niña, está graciosilla.
Me rio.  Estoy siendo mala mala con él, pero en el buen sentido de la palabra.
Decidimos sentarnos para comer a eso de las 1 y media, y dice que ya es tarde en Florencia comer a esa hora, pues vaya con estos spaguetiss si que son tontos....
Nos sentamos a comer en Rivoire, es un restaurante que no es ni muy caro ni barato. Normalito para estar en Florencia.

Cuando tengo la carta en la mano, no se que pedirme me apetece tantas cosas, tengo un hambre voraz.
Lorenzo dice que pidamos cosas para los dos y yo asiento. Él sabe mucho más que yo de estas cosas. Dejo que elija él y me sorprenda.
Pide numerosos platos y todos para mi suenan a chino : panzanella , me dijo que era trozos de pan con verduras, dice que merece la pena esta muy buena. Crostini di fegatini que es una salsa de carne y esas cosas que se extendia con pan caliente. Y para comer como es obvio pide pasta, llamada aquí: pappardelle, llamada en mi casa: tallarines con salsa de tomate y carne.

Pide una botella de vino, pero le hago que pare, y hago que pida agua. El no lo entiende pero lo pide.  Lo tengo confundido.
Comemos muy bien, la verdad que la segunda comida me ha encantado, no creeria que estaria tan buena. Me pongo a reventar de todo.
Lorenzo quiere pedir postres pero yo no puedo mas, si como algo mas explotaré...O peor lo vomitaré todo... ¡Ay por dios que asquito!
 Enseguida nos ponemos en marcha para dar un paseo y bajar la comida.  Me lleva por unos lugares precioso, Florencia es la ciudad más bonita que jamás he visto.
-Esto te gustará preciosa.- Me dice con tono misterioso.
- ¿Él qué Lorenzo? Estoy deseando verlo- Lo miro entusiasmada, quiero saber a donde me lleva.
- Mira, ves más allí -señala con el dedo- Es un mercado, se que te gustan los mercados.Es el mercado San Lorenzo.

- Mira...-me rio- Esta dedicado a ti- le guiño un ojo.
oohh siii, ¡Es un mercado! Puedo comprar, ya era hora, comprare cosas y mañana me iré a las tiendas de marca.
-Me encanta Lorenzo,¿ Cómo sabes tu eso?
- Cositas mias linda...
Eso me hace pensar...  ¿¡Lorenzo que me escondes!!?? Te puedo matar...
                                                                                 *
El paseo ha sido durante dos horas , tengo los pies a no poder más y el pobre de Lorenzo  no puede cargar mas con las bolsas. Me rio para dentro. Pobre al final me da penita y todo. Con esto del embarazo me estoy convirtiendo en una mala persona...Bueno no me preocupo, solo durara 8 meses más y despues seré yo de nuevo... O eso espero.
-Bellisiima, recuerdame no llevarte de compras nunca más. Jamás- Me mira con cara de cansancio y resignación
- ¡Ay lorenzo!, No sabes tú la que te espera aún...-Me mira, me mira y me mira y se calla no habla.
Que gracioso es. Estoy feliz, por una vez puedo decir, que soy feliz con Lorenzo.
Llevo de todo, he comprado bolsos, carteras, cinturones de todos los colores, unos zapatos de tacon verdes que me encantaron, un par de tela para poder hacer unas cositas para la cunita de mi bebé, dos collares, varios pendientes, pulseras... Se puede decir que Lorenzo hoy está cargando como una mula.
-Cariño, vamonos ya a casa- Me dice Lorenzo.- Estoy deseando ir a casa, ducharme y ponerme cómoda a ver la televisión, no aguanto ni dos pasos más.
- Si, por favor Lorin, que no puedo más con mis piernas.Además esta oscureciendo.
- Claro cariño si se te pasan las horas como que.... No puedes ir a comprar porque te pierdes- Me reprende, y yo me rio de su estado, enfadado y cargado de bolsas. No quiere que le ayude... Pues nada que se haga el machito  y las lleve al coche.

Siento un orgasmo al sentarme en el coche. Necesitaba sentarme, estoy super cansada. Tengo muchísimo sueño. No creo que dure nada despierta.
                                                                                           *
Entrar en la casa de Lorenzo es volver a recordar todo de nuevo, todo lo que pasó... La verdad no me siento del todo cómoda con esto, pero no puedo hacer nada, intento no pensar en ello. Mientras yo me doy una ducha, Lorenzo esta preparando algo rico para cenar. En la ducha pienso y pienso, no  se como se lo diré, no se como reaccionará pero lo tiene que saber, tiene que saber que va a ser padre.
 Mi telefono suena, mierda, mierda, mierda. Me quito el jabón de encima y cojo la toalla para el cuerpo y aún mojada cojo el telefono, es Daniel.

-Daniel, hola- Mierda, me incomada hablar con él.
- Hola Amanda, ¿Donde estas? ¿Puedes quedar hoy?- Empezamos, este chico esta siendo un poquito pesado..
- Lo siento Daniel pero no estoy en casa y no puedo quedar.
- ¿Donde estas?- ¿¿¿¿¿¿¿Y a ti que te importa????????? ¿Le tengo que dar explicaciones de algo? No sé que decirle...
- Daniel, no puedo hablar ahora mismo, te llamo en otra ocasión- Y sin más le cuelgo. A ver si asi se entera que me deje tranquila...
Me pongo mi pijama y me estiro un poco en la cama con mi libro y empiezo a leer. Estoy esperando que me llame Lorenzo para bajar a cenar...

-Vamos linda, levantate dormilona...- siento como me acarician las mejillas.
Abro los ojos muy abiertos, parezco asustada.
-¿Me he quedado dormida?
-Si bellisima, vamos ya está lista la cena.
Estamos cenando tranquilamente cuando lorenzo lo interrumpe. Se levanta, se pierde entre la oscuridad del salon de su casa y al poco rato vuelve. Yo he parado de comer y solo lo miro. Trae una cajita de terciopelo morada y grande en la mano.
-Toma bellisima, esto es para ti.
Miro la caja y le miro a él. ¡Que lindo es! Me ha hecho un regalo. ¿Celebramos algo? Si es así no lo recuerdo.
Sujeto la caja y la abro.
- Bonita Lorenzo, me encanta- me acerco a el y le beso. Que ilusión me ha regalado un brazalete. Lo inspecciono un poco y tiene grabado nuestros nombres


Amanda&Lorenzo

Oh, pero que pequeñito es, que gracioso.

Pasamos una noche relajada, no he tenido náuseas pero si ganas de decírselo.
Creo que mañana será el gran día, creo que mañana se lo diré sin falta.


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Sabe que ella no quiere saber nada de él, o por lo menos en este momento.  Sabe que él para ella no es más que un segundo plato, pero aún así siente que tiene que dar la cara, la llamada, esa llamada va a cambiar su vida. Tiene un trabajo que hacer por delante, y el plazo es dentro de dos semanas. Tiene que cumplir la fecha o estara muerto. No se lo puede permitir. 
Su teléfono vuelve a sonar. Su cara se estremece, tiene miedo de lo que le deparará de nuevo la llamada. 
Su cara es fria, no se puede creer lo que le han dicho. No se puede creer que lo tiene que hacer, no se lo puede creer. Esto le puede. Pero tiene que hacerlo.  ¿Por qué le tocará a él hacer eso? ¿No tiene a más? No se da cuenta que se ha enamorado y todo lo que puede hacerle daño le mata. 
Esta enamorado, y no es correspondido.

Capítulo 12

¿Seré una buena madre?¿Querré a mi hijo?¿Podré darle todo lo que necesita?¿Cómo es criar a un niño? ¿Cómo sera el parto?
Miles de preguntas me rondan la cabeza. Yo, que necesita pensar algunas cosas ahora tengo doble trabajo.
No sé si debería decírselo a Lorenzo. Bueno decírselo aún, porque de saberlo lo va a tener que saber, es su hijo y eso no lo va a cambiar nada. Aunque conmigo quizás no se haya portado del todo bien, esta criaturita se merece un padre. Aunque esté loco perdido.
Me toco la barriga con la mano, me miro al espejo y me imagino a mi, dentro de unos meses, con una barrigota increíble. ¡Oh dios mio, estaré feísima!
Me viene a la cabeza mi madre. Tengo que llamarla.
-Mamá, estoy en mi casa- Le digo.
-¿En tu casa? ¿Qué haces allí? Amanda Sparks ¿Acabas de dejarme sola?- Esta gruñendo.
-Me surgió un gran problema, lo siento.
- ¿Vendrás?
-No, mamá ya nos vemos aqui.
Tengo ganas de contárselo pero me contengo. El primero que quiero que lo sepa es Lorenzo.
Como tengo un mes no se me nota nada pero dentro de unos meses no lo podre evitar y aparecerá la dichosa barriga, las estrías, el dolor de tetas...
¡Ay dios mio! ¿Cómo será eso?
Aún no le he visto la cara y ya lo quiero con todas mis ganas, aunque eso no quita que esté muerta de miedo.
Miro mi casa, se me quedará pequeña para mi y para el niño, y si Lorenzo  vive con nosotros, debemos buscarnos otra casa...
¡¡ Una mudanza!!!, ¡¡Un niño!!
Si me hubieran dicho hace un mes que me pasaría esto me reía en la cara de quien me lo dijera.
Quien me iba a decir que yoooooo, Amanda Spark me quedaría embaraza.... Con lo poco que me gustan los niños. Si es que lo odio, son los peor... Pero a mi hijo lo amo, desde que sé que lo tengo dentro lo quiero.
Todo esto es nuevo para mi, he sido hija única, sin ningún primo pequeño, siempre he sido yo la más pequeña y no se cuidarme ni de mi misma... Sé criar perritos pero vamos que ni se le parece...
Voy a buscar en Internet información sobre el embarazo, los cuidados y demás...
                                                                                     *    
 ¡Que lió!, ¡Qué de cosas de embarazas!, ¡Qué de cosas del parto!, ¡Qué de cosas del bebé...! Madre mía, Madre mía...
¡Joder, joder, joder! No me quedan más uñas que morderme. No se cuando se lo voy a decir a Lorenzo pero estoy deseando decírselo... Solo quiero hacerlo en el momento apropiado.
Ahora que lo pienso, ¡Joder!, un hijo de Lorenzo y mio... Con estos padres tan guapos este niño o niña sera un o una rompe corazones...  Me estoy empezando a ilusionar, creo que las hormonas están haciendo de las suyas. LLuvia  me dijo que estaría a la orden del día el cambio de humor, las lloreras y demás... Y qué es  normal las náuseas y el vómito en el primer trimestre, es lo más normal.
 Estoy de 3 semanas aproximadamente.
Esto es una locura, quedarme embarazada de un tío que conozco hace poco, pero siento como si le conociera toda la vida y los dos nos queremos tanto como nos enfadamos.
Ahora, hoy, en este mismo instante me quiero dedicar a mi  y  al pequeñín que tengo dentro.
Me doy una ducha relajante, me echo mis cremitas, me pinto mis uñas ... todo eso que hace las mujeres para mimarse ellas mismas.
Me visto, escojo una mallas negras con una sudadera y unas deportivas, una cola alta y me pinto las pestañas y me voy.
 Cojo el coche y me dispongo ir a la mercería más cerca. Antes de bajarme del coche recibo una llamada, es Daniel. ¡Joder! Pobre Daniel...
- Buenas tardes Daniel
- ¿Cómo estas nena? - Me pregunta preocupado.
-  Bien, al final todo fue un mal entendido, siento por lo que te hice pasar...- Le digo sinceramente
- No pasa nada Amanda, ¿Cómo que fue un mal entendido?- Me pregunta confundido.
- Ya te contare Daniel, tengo q colgar estoy en la carretera.- Intento cortarlo lo más rápido posible , se me hace incomodo hablar con él.
- Vale Amanda, ten cuidado ¿Cuando nos podremos ver de nuevo?
¡Y epa! Aquí esta la famosa preguntita de los cojones, que nada más hace que tocar los cojones.... No se joder, no se cuando quiero verte, no se si quiero verte , no se nada ¡Déjameeeeee tranquilaaaa! Quiero gritarle.
- No se Daniel, supongo que dentro de unos días, estoy muy liada, lo siento.- Intento sonar convincente
- Vale nena tu me avisas... pero no me hagas esperar como la anterior...
- No, de verdad. Adios Daniel.- Me despido y cuelgo, no espero a que me diga ni adiós.

¿Tan difícil es tener un puto día tranquilo?
Apago el movil. Paso de más llamadas, paso.  Quiero ser egoísta por una vez y pensar en mi y en la criaturita que tengo dentro.
De vuelta a casa con la compra echa me dispongo a hacerlo.
Tengo agujas nuevas,  una lana preciosa super suave y calentita. Nacerá a mediados de abril me dijo Lluvia. Se me va a hacer larga la espera y eso que ya llevo un mes... <<ánimo Amanda, solo te quedan ocho.>>  La pepita grillo que vive dentro de mi me anima...
Me pongo a hacer una toquita color beis.
¡Si!  Soy una cajita de sorpresa y si, hacer de todo en la costura, me lo enseño mi abuela, que echa hacia hasta braguitas de crochet para los bebés... Si ella estuviera ahora aqui conmigo segurisimo que le haría una gran ilusión hacerle cositas... Desde donde esté se que se sentirá feliz.  Una lagrima cae de mi mejilla al recordarla... Era una mujer tan buena y dulce...

Tengo hambre, mucha hambre, me comería  de todo.
Tengo un antojo, ¿Mi primer antojo? ¿O es que simplemente tengo ganas? Me río, no se que pensar ya. Que sorprendente es todo esto....
He pedido comida china para comer, no vaya a ser que tenga un antojo de rollito de primavera y venga el niño con el rollito marcado en el brazo.
He devorado con todo, no me ha sobrado nada. Como siga comiendo así, en vez de andar voy a salir revoleando.
Estrías. Grito.
Doy un salto del sofá. No, no, no estrías no. No quiero estrías, no quiero marcas en mi cuerpo. Oh joder... bajaré a la farmacia en cuando abra.
Pican a mi puerta, como siempre tan oportuno todo. Dejo mis agujas de punto bien puesta encima de la mesa y voy a abrir la puerta.
Un hombre, con un ramo de rosas en la mano.
-Esto... Hola
-Amanda Sparks, ¿Verdad?- Pregunta
- Toma esto es para ti.- Alarga su manos a las mías y me da el ramo de rosas.
-Gracias.- Logro decirle, estoy sorprendida.
Sin más se va y me deja a mi en la puerta con un ramo de rosas en la manos. Parezco tonta.
Busco si hay alguna tarjetita y ¡¡Bingo!!

Bellisima, perdóname no soporto estar más lejos de ti. Te quiero

 ¡¡Te quiero, ha dicho te quiero!!. Estoy dando saltitos de alegria. Aysss Lorenzo, me va a volver loca.
Ohh que bonito, mi voz interior se revela de nuevo. Hija de puta.Parezco bipolar.Parezco golum del señor de los anillos.
La verdad que ha sido un detalle muy bonito pero si se cree que lo voy a perdonar por un ramo de rosas esta muy equivocado. Tengo que hacerle sufrir un poco, que sienta que me esta perdiendo a ver si se espabila el muy tonto...

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Estos seis días ha sido para Lorenzo una verdadera tortura. Una risa de bruja suena dentro de mi. Se lo merece, pero no aguanto más, en realidad estoy deseando estar con el. Creo que hoy hablaré con él.
Lorenzo el primer día me mando un ramo de rosas, el segundo me regaló un peluche y  una rosa, el tercer día me regaló una caja de bombones Nestle que por cierto estaba de rechupete no me duro ni un día. El día cuarto yo esperaba mi cajita de bombones pero nada, me regaló una botella de champán con una nota diciéndole que lo perdone. El quinto día ya cansado me regaló de nuevo los bombones que como antes no me duró ni un día y me dejó una notita riéndose , porque sabia que yo me bebo el chocolate. Y hoy,  aun nada. Estoy esperando su regalo. Esto se ha convertido un juego para mi, no tanto para él. Pero hoy si o si quiero tenerlo dentro de mi, no aguanto más.  Quiero contarle lo de nuestro hijo , quiero contarle todo lo que sé.

Llaman a la puerta,  y voy corriendo a abrir entusiasmada ¿Qué será lo nuevo Lorenzo? ¿Me lograras sorprender?
Mi cara es de poker...
Allí esta él, con su barba de tres días. ¡Pero qué guapo está!. Como me pone. Como me gusta...
Nos miramos  y siento que mi corazón da un vuelco. Se me acerca lentamente  y me coge por la cintura, me abraza fuerte y me besa el cuello. Yo le devuelvo el abrazo.  Lo siento tan pequeño, pero tan pequeño que me da cosica. ¿Me esta saliendo ya el instinto maternal o qué?
¡Dios las hormonas me mataran! Aún me queda 8 meses, madre mía pobre de Lorenzo,pobre. Le compadezco.
- Tú próximo regalo está en Florencia, a la espera a que vayas, te lo daré el segundo día. ¿Aceptas bellisima?- Su cara es tan linda, cree que le voy a deicr que no.
¡Es tan mono!  Me hace enternecerme.
-Claro que quiero ir Lorenzo, claro. Pero solo con una condición- Me pongo en plan interesante.
-¿Cual? Dime, la que sea.- Me mira a los ojos y empieza a sonreir. Se ve feliz, no sabia que yo provocaba lo mismo que él provocaba en mi.
- Que tu no vengas Lorenzo- Seguidamente me rio, la cara  que ha puesto por un segundo hará que me ria de él toda su vida. Si es que soy una bruja.
- Muy graciosa, bellisima, vamos empieza a hacer la maleta que salimos esta noche.
Bésame, estoy gritando que me bese, estoy deseando sentir sus labios saboreando los mios.
Me aparto para dejarle pasar, cierro la puerta. Y voy tras él, le invito a sentarse a mi lado. Me acerco, quiero que me bese.
-Amanda, no te me acerques tanto, no me tienes, joder-
Me hace gracia, me confirma que él esta igual que yo. Pero le dará cosa dar el paso.
Pues a la mierda, lo doy yo, no aguanto más.
Me acerco, empiezo a besarle y morderle el cuello, este es el grito de guerra.
- Lorenzo quiero que tú y tus soldado estéis dentro de mi.- ¡ala! , ¡Qué bruta he sido!  Lo miro , su cara es indescriptible. Es una mezcla de confusión y calentón.

Me besa, me muerde, me toca, me eriza la piel, me hace sentirme especial.
Me quiere, me toca, me chupa, me besa, me succiona, me ama.
Lo hacemos. Lo hacemos como nunca. Hacerlo con él es tan jodidamente  maravilloso, es ir a otro planeta, te hace llegar al éxtasis. Te hace volar. Joder, Lorenzo es la ostia.
Me embiste poco a poco, hasta  llegar a un ritmo fuerte, me besa  mientra me embiste, sus embestidas me hacen jadear.
Me hace tener múltiples orgasmos. Lorenzo esta apunta de llegar al suyo y yo hago todo lo posible para que llegue. Me pongo arriba y empiezo arriba  y abajo 1,2,3, veces  Lorenzo me sujeta por la cintura y con un gruñido ahogado se va dentro de mi.
Es tan atento, es tan cariñoso hasta cuando lo hacemos. Hacerlo con Lorenzo es un placer.
                                                                                         *
Al poner un pie en esa tierra vuelvo a tener unos nuevos recuerdos de Florencia. Recuerdo lo que paso con su ex, me gustaría saber que ha sido de ella pero, la verdad paso de preguntarle. No quiero estropear la sorpresa que tenga. No quiero estropear nada.
El como caballero andante me coge las maletas y me abre la puerta para que yo pase.
Me tiene enamorada. Loca, y enamorada.
Entro.
- No vayas al cuarto aún, quiero que vayamos luego.
-¿Por qué? ¿Qué tienes preparado?- Mis ojos se abren en órbitas.
- Joder Amanda, no te puedo ocultar nada eh- Me dice con una sonrisita en sus labios.
Asiento. Miro a su alrededor, en la casa sigue estando todo igual ,nada a cambiado.

-Bellisima- Me llama- Ven tengo un cosita para ti.-
- ¿Ahora ya puedo ir no? No sabes tu nada, guapo
 Entro en la habitación y veo lo que ha hecho. Esta todo cubierto de pétalos de rosa, hay un caminito hasta la cama , en la cama hay un gran corazón de pétalos de rosa y relleno de estos. En la mesita de noche un cubo con una botella de vino dentro y Lorenzo esta esperando en la cama encima del corazón completamente desnudo.
Me espera un gran noche, una noche de sexo, de amor y de pasión.
-Desnúdate...-
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No puede soportar no verla, no puede soportar no estar con ella, no puede soportar saber que él para ella no es nada. La ve, la sigue, la llama , pero nada, no tiene respuestas, o no siempre.
No esta preparado para lo que viene encima, no lo está.Cree que tiene todo bajo control pero lo que no sabe es que él ya esta jodido y no puede tener nada bajo control.
Ha entrado en un tema amoroso. En un tema jodido para él.  No tiene escapatoria no tiene otra opción que seguir haciendo lo que hace. Y joder su vida.
En lo más profundo de él sabe que esta haciendo mal, pero es egoísmo, piensa en él.

Capítulo 11

Miedo.
1 palabra
5 letras
Muchos sentimientos...
Siento que mi mundo de fantasía y de color ha caído. Quiero despertarme de esta puta pesadilla, quiero abrir lo ojos y encontrarme con Lorenzo estirado a mi lado, quiero volver a ver esa sonrisa, entregarme de nuevo a él, a sus labios, a su lengua...
Me arrepiento. Me arrepiento de no haber pasado con el el tiempo que debí. Me arrepiento el haberle reprochado cada cosa que decía o hacia...Me arrepiento de todas las cosas malas que le he dicho...
mi cabeza va a explotar, mis ojos no pueden más y mi cuerpo me pide descansar. Yo no puedo.
Necesito verlo por ultima, decirle tantas cosas... Necesito decirle que le quiero, necesito decirle que quiero sentirlo entra mis entrañas, que necesito cada beso que me da, necesito decirle que su boca es mi respiración y que su cuerpo es mi mundo...

Mis ojos. Mis ojos me escuecen. Ahora tengo que ser fuerte y entrar en el hospital. Ir a recoger sus cosas y verlo por última vez... por ultima vez...
No quiero eso, no quiero verlo por última vez, no quiero aceptarlo, no puedo aceptar que Lorenzo se ha ido, y ésta vez para siempre... Me quedaba muchas cosas que vivir todavía con él...
Respiro antes de entrar, varias personas me miran, se pensaran que soy tonta.
Estoy en la puerta decidiendo si entrar o no... Decido hacerle frente y entro. Nada más poner un pie en el hospital y oler ese olor tan típico de hospitales, mi barriga vuelve a descomponerse, mis náuseas vienen y siento que me falta el aire...
Una mujer mayor que hay por allí dando vueltas se percata de como estoy y se me acerca.
- Niña, ¿Se encuentra bien?- Es una adorable ancianita regordeta y con gafas.
-No se preocupe, señora- Le digo con un gesto de despreocupación
-Si estas palida niña, estas más blanca que las paredes de este hospital...-
Se me acerca y me mira a la cara.
- Uuy niñaa, yo te diria algo, pero  no se si te sentara bien...- Me mira con el ceño fruncido, Me inspeciona de arriba y bajo y me dice:
- Niña, tú estas embaraza.-
Mi cabeza gira rápidamente donde ella se encuentra y al ver mi mirada desencajada se le descompone la cara.
- Lo siento niña, pero te lo tenia que decir.  No soy médico, pero soy un vieja que ha traído al mundo a 3 varones y a 3 hembras y sé de lo que hablo.
-No puede ser...- murmuro silenciosamente.
El saber que podria traer algo en mi vientre me hizo marearme, la viejita corriendo me se acerco a agarrarme como pudo para que no me cayera al suelo.
- Ven, vamos a echarte agua en esa cara para ver si espabila.
No puede ser, Lorenzo muerto, yo embaraza. ¿Algo podia ir peor?
La mujer tira de mi hasta llegar al baño. Saca de su bolso un pañuelo, abre el grifo lo moja y me lo restriega por mi cara.
-Venga así, vamos niña, ponte mejor. Estar embaraza no es nada malo... desde un punto de vista es bueno.
-Si... pero, pero tiene que ser imposible
-¿Acaso eres virgen?- Me mira con cara graciosa.
Yo no tengo humor en realidad he venido a por las cosas de Lorenzo y no tengo ánimos para nada...
- No soy virgen,pero tomo precauciones.
-¿Sabrás quien es el padre verdad?- Mi mara con cara incrédula.
Esas palabras me han ofendido, que pensara estar viejita de mi?
- Claro que se quien es el padre, es mas el padre...- callo, mis ojos empiezan a llenarse de lágrimas pero abro mas los ojos para ahorgar mis lagrimas en ellos. No quiero llorar, bueno, ahora no.
- Levántate, y mírate al espejo niña.
Hago lo que me dice la anciana.
-Dime amanda- le indico.
-Precioso nombre querida, yo soy Magdalena, Pero llamame Lena solamente.
- Vale.- Le digo con un tono cortante.
- Mírate al espejo, eres una mujer guapa, atractiva. Un hijo no te va a quitar nada de eso, al revés te dará lo mejor que ha pasado en tu vida. Creeme. Soy madre de 6 hijos y los quiero a todos por igual y daria mi vida todos los dias por ellos.
Me miro al espejo. Mi cara da pena verla, tengo ojeras y estoy blanca, las pecas se me resaltan y mis ojos no tienen brillos. Parezco una zombi. Cualquiera que me veo podria asustarse. Miro mi barriga. La toco con las dos manos. No me puedo creer que dentro de mi vientre tenga a un ser vivo. A un ser vivo mio y de lorenzo.
-Niña, hazte la prueba para mayor fiabilidad. Pero yo juraria- me mira de arriba abajo, de mi cara a mi barriga y de mi barriga a mi cara- ¿Tienes vómitos? ¿Mareos?
- Claro...- asiento, hago calculos con la cabeza y entre una cosa y otra se me ha pasado, la regla tenia que haber llegado hace una semana y media.¡ Esta vieja va a tener razón!
- Diria que estas de un mes mas o menos. Hazte la prueba cuanto más rapido mejor, deben saber si esta bien el feto.
- Muchas gracias por todo Lena. Me hare la prueba sin dudarlo. Tengo que irme...
Sin más me despido de la anciana mujer y le agradezco de corazón todo lo que ha hecho por mi. Ella sin mas me da la enhorabuena y se marcha.
Cuando estoy preparada salgo del baño pensando en lo que de verdad he venido a hacer...
Miro al frente, ¿Estoy viendo de verdad lo que estoy viendo?  Me froto los ojos varias veces con las manos. No puede ser ¿Qué coño?
Voy corriendo a donde se encuentra, no puede ser, no puede ser verdad, esto es un espejismo, esto es un espejismo, una ilusion... un fantasma...
Miro su cara.
-Hola-  me dice.
Mi respuesta, una ostia en toda la cara.
Su reacción, se echa una mano a la cara.
Mi nueva reacción, otra ostia en la mejilla.
Su nueva reacción, aguantarme las manos.
- Amanda ¿Estas loca? ¿Qué te pasa?
Me indigno, esto es increible pero ¿Que le pasa a este tio?, es un idiota, es un imbencil.
- ¿Pero que coño te crees? ¿Por qué te ves capaz de hacer esto? ¿De que vas?- Estoy apunto de explotar en lágrimas, me hecho las manos a la cara y sin darme cuenta estoy gritandole.
- ¿Por que dices que estas muerto y estas vivo?,¿ Por qué me llamas ? ¿Por qué haces estas tonterias?.-  Mi voz suena ronca, mis gestos son agresivos.
- Ya amanda tranquila, te lo explicaré todo, de verdad vamos.
Me coje del brazo y me lleva hasta una cafeteria del hospital. Yo me dejo ir por todo, necesito una taza de cafe, pero esta vez no se que haré, no se si se lo tirare entero o solo la mitad. Maldito hijo de puta. Estoy soltando tacos hasta que llegamos al sitio.
Me siento, estoy enfadada en mi cara se me ve, es una mezcla de cansancio  y de enfado. Lo mataria, lo mataria sin dudar, lo asesinaria, lo despellechejaria hasta hacerlo trizas, lo cortaria en cachitos....
Pero estoy contenta.
Muy contenta, pero en el fondo. Está vivo... ¡Está vivo!  Puedo hacer todo lo que tenia en mente con él, puedo aprovecharlo.. Está aqui conmigo, ¡Esta aquí...!
Siento que me he kitado un gran peso de encima, estaba tan disgustada por que  pudiera haber muerto...
-Amanda,- me llama, me giro con una mirada asesina. Si las miradas matasen Lorenzo ya estaria muerto.
-No me mires asi....- Me pide con sus manos acariciandome el pelo..
- Estate quieto- Le quito la mano- Y explícate-
Su semblante es serio, se sienta a mi lado y me mira...me mira y me mira. Hace amago de hablar pero no lo consigue, se queda callado. No se a que esta esperando... Me estoy poniendo nerviosa, quiero saberlo todo ¡Ya!
- ¿Piensas hablar o vas a estar mucho rato callado? Lo digo por irme a dormir a mi casa, que estoy cansada
Fija su mirada en mi, pidiendome a gritos que me quede.
-Habla, ya- alzo la voz, estoy perdiendo los nervios ¿Le voy a tener que dar otra bofetada para que espabile? Vamos Lorenzo.....
- Vamos  a ver Amanda- Se pone recto en la silla y me coge de la mano, yo hago un gesto para quitarsela pero me la agarra fuerte y yo cedo. Que dulce es tener de nuevo su mano. Mis pelos se ponen erizan namas que con ese contacto.
-Amanda, bellisima, si te hubiera dicho que queria hablar contigo no hubieras venido, lo se, eres una cabezota nata y despues de la discusion en el bar, te hubiera perdido y eso no quiero que pase.- Me mira, ¿enserio?¿ todo solo por eso? ¿Cuando yo me estaba muriendo por él? Joder... No me reconforta nada su explicación...
- Lorenzo ¿Pero a ti que coño te pasa?- Mi cara es de indignacion.- ¿Pero tu ves normal lo que has echo? Pero si lo has empeorado, ¿Tú ves normal que me llamen y me digan que estas muertoo? ¿Tú sabes lo que yo he pasado? ¿Tú sabes como estaba? Eres... eres un imbecil Lorenzo... Estas loco, Estas loco.
Mis palabras la caen como una jarra de agua fria y se empalidece cuando ve que no hay respuesta positiva por mi parte
-Pero Amanda...
-Pero ni Amanda ni Amando. ¿Tú ves normal esto lorenzo de verdad? - histeria se llama a lo mio.
-Tranquílizate, bellisima.- Me dice esto tras tocarme un hombro. Su contacto hace que me relaje un poco. Respiro. Cuento hasta diez, no mejor cuento hasta 50 porque si no, lo mato, pero literalmente.
- Ñorenzo, necesito de verdad pensar, dejame pensar, tengo un cúmulo de cosas que va a hacer que explote mi cabeza.
A mi mente viene el recuerdo de la anciana de hace unos minutos, joder ¿ Y este capullo va a ser el padre de mi futuro hijo? Como sea igual que su padre pobre de mi...

- Te acompañaré hasta casa. - Me dice triste.
- Solo me acompañaras, nada más. No subirás.

Nos montamos en su coche y me deja en el portal de mi urbanización, en realidad quiero que suba, quiero hacerle el amor, quiero besarle, quiero sentir su olor, sus labios, su todo, pero estoy cabreada. No es normal lo que ha hecho.

-¿Quieres quedar más tarde?
-No.
-¿Y mañana?
-No.
Al ver mi negativa no se da por vencido.
- Amanda, por favor déjame entrar en tu vida de nuevo y bien
Me rio irónicamente.
-¿De verdad? - al final resulta ser gracioso. Suspiro.- Mira Lorenzo, dejame unos dias tranquila por favor, yo te llamo cuando quiera quedar.
- ¿Y si no llamas?
- ¡Pues te jodes!
Soy una loca, soy una amargada, soy todo. Pero estoy cabreada y hay cosas que es mejor no permitir que pase una segunda vez... No lo podré soportar. No lo he matado yo porque si no iria a la carcel, pero ganas no me han faltado. Este tio saca mi instinto asesino.

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Sonó el telefono y se levantó de la cama rápidamente. No se esperaba esa llamada, o no ahora. Su cara palidecia. Esa llamada solo significaria una cosa...
No sabia si cogerlo, o simplemente no hacerlo. Si no lo hacia no iba a acabar bien y eso él lo sabia. Habia visto torres mas altas que él caer. Decidió cogerlo al cuarto pitido.
-Tres aquí, dime.- su voz sonaba temblorosa, no queria saber lo que le deparaba esa llamada.
Su mandibula se encabaja. Su aspecto era una mezcla de miedo y consternación
Tenia que hacerlo, sabia que tenia que hacerlo. Da igual lo que el quisiese o opinase, solo tenia que  hacerlo y ya esta.
No queria, no de ese modo. Ya estaba lo bastante jodido como para hacer eso...
Queria olvidarse de donde estaba metido, queria salir de alli, no queria pertenecer más a nada, ni a nadie. Queria ser libre y hacer lo que quisiese.
Nada podia hacer, solo agachar la cabeza y obeceder. Eso si queria seguir con vida, que no es poco...
Cogió sus zapatillas de correr y se fue a despejarse un poco. Nunca se habia propuesto en dejarlo, ni siquiera sabia las consecuencias que podia tener dejarlo... o si, simplemente tenia miedo. Igual que las otras personas. SE sentia tan identificado con los demas que ahora se sentia mal.
Se odiaba, odiaba su vida de mierda hasta ahora. En un momento todo cambio. Y el queria cambiar. Queria hacerlo...
Mientras más corría más pensaba. Nada le servía.
Llegó hasta donde vivia lo que él pensaba que seria su cambio de vida. Intenta encontrarla. La vió salir, pero ella no le vió. Se escondió. Fue feliz por ese dia. Verla aunque fuera dos segundos lo hizo muy feliz.
Abrió su armario y empezo a preparar las cosas. Metia lo de siempre, ya estaba acostumbrado y lo hacia automaticamente. Lo tenia que hacer todo en un plazo de dos semanas. Tenia que planearlo todo.
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-¿Ves esa cosita de ahí?- me señala con el dedo a un monitor, la imagen se ve en blanco y negro.
-Si- apenas puedo respirar.
- Felicidades, Amanda, vas a tener un hijo.
Una mezcla de sentimientos contradictorios: felicidad y angustia, euforia y miedos...
Y muchas preguntas, muchas, muchísimas...

Capítulo 10

CHICAS PUBLICO LOS MIÉRCOLES Y VIERNES. MIL GRACIAS, DENTRO DE NADA LES TRAERÉ UNA BUENA NOTICIA :)



1 semana después...

Mi dolores de cabeza va en aumento, no se si es de pensar o que se yo.
Tengo un humor de perros, mejor que nadie me hable o conseguirán que lo muerdan...
No he sabido nada de Lorenzo durante esta semana, tampoco lo he llamado, ni quiero saber que es de él. Me ha parecido muy fuerte lo que me ha llamado, no se lo consiento ¿Qué coño se creerá?
Paso de todo me voy de vacaciones.

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Estoy de vacaciones en la playa.Hace muchísima calor. Miro a mi alrededor y esta todo lleno de chicos guapos y que tienen un cuerpazo, veo a guiris, a franchustes... todo tipo de extranjeros y yo rallándome por un gilipollas.
Si sigo así moriré derretida, voy a ir a chiringuito a por una cerveza bien fría.
-Hola guapa- Me saluda el camarero del chiringuito.
-Hola guapo.- le sonrío- Me pones una cerveza, porfa- Suena a tonteo.

¿Estoy tonteando de verdad con este tío? Flipo conmigo misma.
- Aquí tienes, si quieres algo más, ya sabes donde estoy- Me guiña un ojo.
Salgo super contenta del chiringuito, encima he ligado. Me ha subido los ánimos. A nadie le amarga un dulce.No,No y a mí menos.
Voy corriendo hasta donde he puesto mi toalla, la arena esta que arde. Voy dando saltitos parezco un perrito.
Miro al frente, el agua esta petada, no cabe ni un alma dentro. ojala viniera una ola y se tragaran a todos.
Mierda... Ahora niños jugando con la pelotita, como me den con la pelota se la comen vaya...
-Hija, cambia esa cara.
Si, mi madre ha venido conmigo. No quería que viniera pero ella insistió y no pude decirle que no, mi madre es asi.
- Mama no estoy de humor.- le echo una mirada asesina.
-Querida que cara mas fea tienes, anda y vete a dar un baño con esos chicos que no paran de mirarte.
Mi madre sabe como dejarme cortada. ME pongo colorada como un tomate, esto de que me miren y yo no darme cuenta no me gusta...
-hija, detrás mira corre.
Giro mi cabeza lo más disimulado que se pueda y allí están dos bombones, morenos con un buen cuerpo y una buena delantera. Miro a mi madre rápidamente y al ver mi cara desencajada se ríe.
- Hija yo también tengo ojos en la cara, elige uno y yo me quedo con otro.
Mi cara debe ser un poema, mi boca abierto y los ojos fuera de si.
Mi madre se ríe a carcajadas...
-Hija, como siempre te lo tomas todo a pecho. ¿Cuando te vas a dar cuenta que tienes a una madre más moderna que tú?
Sigo flipándolo todavía, pero donde va esta mujer...
- venga ya, mama. No seas una viejita salida- intento picarla a ver si se la baja los humos.
-Viejita salida?- Me mira con cara de querer matarme- Ahora vas a saber quien soy.
Se levanta y se dirige a donde están estos chicos. Yo intento escabullirme y que no se den cuenta que yo soy la hija. Que verguenza.
Mira la muy putaaaaaaaaaaaa, si le esta dando dos besos y los tios tan felices, madre mía, madre mía... Yo no sabia esta faceta de ella. Mira hacia donde estoy, o que vergüenza, me intento tapar como pueda con la toalla. Esta no es mi madre, me la han cambiado.
Se acerca, se acerca,  ¡joder, joder! ¿Qué hago?
- Hola Amanda, cariño.
-Hola- ¡Oh por dios! Estoy paralizada... ¿Qué carajo hace mi madre? Se ha ganado la residencia a pulso.
- Te presento hija, este es Elías- Se acerca y me da dos besos- Y este es su pareja, José-  Oh dios, respiro tranquila. ¡Son gays!
Mi cara cambia y mi estado también, ahora estoy super tranquila.
Se sientan al lado nuestra un rato y nos cuenta que son de Asturias y llevan juntos unos 8 años, dentro de dos años se casarán.
Me encantan son maravillosos, intercambio teléfonos y les invito a venir a Madrid, pero cuando no haga calor. Ellos tambien me invitan a Asturias. Estoy más contenta de haberlos conocidos... Y todo gracias a mi mami.
¡Sí! Ahora es mi mami, para algo que hace bien... ¡Hay que agradecérselo!
-¿Qué te pasa Amanda, no te ha gustado que fuera a por ellos?
- Mamá, ¿Cómo sabias...?
- Ais, hija... Esta vieja sabe mas de lo que tu crees-
Me río, esta mujer tiene unas cosas que no son normales.
- Vamos al agua, anda...
- Vamos.-
Dejo mi cerveza en una sombra junto con una caipirinha de mi madre.En el agua disfrutamos como unas niñas, cabuzones, salpicándonos agua, ahogadillas...etc

Decido salir del agua, tengo ganas de coger un poco de color, aunque me tengo que echar crema, si no me salen pecas hasta en las piernas y me pongo rojita como un tomate.

¡Ay! Qué bueno es esto. He echado una cabezadita en la toalla, estoy en la gloria.
-Mamá, ¿Por qué me dejas dormir?- Llamo a mi madre.-¿Mamá?-
Miro al lado mía pero no está, miro en el agua y tampoco está. ¿Dónde coño se mete esta mujer? Siempre esta perdida, parece una cría...
Miro hacia el chiringuito, venga ya... ¡No me lo puedo creer! ¿Qué hace mi madre morreandose con uno como si tuviera 15 años?

¡Dios, dios que imagen! Borrar, borrar. Quiero eliminar esta imagen de mi cabeza.
No quiero seguir viendo.
Bajo la cabeza hacia la toalla y espero y espero pero nada no llega. Me levanto  y voy a acercarme donde esta ella. No quiero que se crea ese hombre que es una cualquiera, faltaría más...
Llego hasta donde esta mi madre. Por dios, ¡Pero si le esta tocando el culo! Esta faceta de ella me deja muerta.
Empiezo a toser enfrente de ellos, pero parece que no se enteran o no se quieren enterar.
Le doy golpecitos en el hombro hasta que me ve y se separa rápidamente. El hombre se quedó estupefacto.
-Oh, no sabes cuanto siento interrumpir esto, pero... es mi madre-  le miro con cara de asesina y el parece haberlo captado. Da un paso hacia atrás.

Sujeto del brazo a mi madre para que vea este hombre que tiene protección. A esta viejecita solo la puedo lastimar yo, y ni eso. Mi cara es increíble.
-Armando, te presento a mi simpática hija, Amanda.-
-Hola Amanda, encantado-
-Hola-logro refunfuñar.
Hace un amago de darme dos besos pero sabes que no estoy a la labor. Decide no hacerlo. Menos mal que me ve venir.
- Bueno ¿Y de que lo conoces mamá?
- Pues de aquí linda, de aquí- Me dice en tono burlón.
La tensión se corta con un cuchillo. ¿Estoy celosa de que otro ocupe mi tiempo con mi madre? Sí, lo estoy, es mi madre y punto.
- Hija, ¿Por qué no te vas un poco a tomar el sol y me dejas seguir hablando con Armando un rato y ahora voy para allá?
¿Me esta echando disimuladamente? Mi boca se abre y una ceja se me levanta.
- ¿Hablando? o ¿Quieres decir morreando?
El hombre se ríe, pero le echo una mirada y enseguida pone de nuevo su gesto serio.
- Me voy, adiós Armando. Encantada.

¡Qué fuerte, qué fuerte! Mi madre ligando por ahí y yo amargada en la sombrilla, estoy se cuenta y no se cree.
Voy a coger mi móvil a ver si tengo alguna llamada o mensaje. Nada, cero patatero. Si es que...
Me cojo mi libro y voy a leer un rato. Estoy ya aburrida de estar mirando a los niños jugar con la arena y haciendo castillitos. ¡Que pesados son! Si no lloran, gritan, si no se enfadan... No quiero hijos, no quiero. Nunca seré una buena madre.

-¿Amanda?  ¿Eres tú?
Una voz que me resulta familiar me esta llamando. Levanto la cabeza del libro y ahí veo al pedazo de moreno del otro día. ¡Oh dios! Es Daniel. Esta genial con ese bañador, ¡Madre mía! Como esta este tiarron.

- Daniel- me levanto corriendo de la toalla y me intento poner bien el bikini lo más rápido posible.- ¿Qué haces por aqui?
- Eso te digo yo, ¿Que haces por mis tierras madrileña?
- ¿Cómo que por tus tierras?¿Tú eres de aqui?
- Exacto, nena.
Mi boca se abre tanto que me duele hasta la mandíbula, quien me iba a decir que este Daniel seria andaluz...
- Cada vez me sorprendes más.
- No te lo esperabas eh...
- Pues no, la verdad es que no, joder.
- Oye, ¿Me puedo morir esperando a que me llames verdad?
Me río. Lleva razón pobrecito. Me dijo que lo llamara pero he pasado de él, he estado muy ocupada con el tema de Lorenzo.
No sé que hacer, es hora de olvidarme un poco de Lorenzo y pensar más en mi. A la mierda Lorenzo.
- Lo siento, pero he estado muy ocupada...
- Si claro... Ya veo- Se ríe, menos mal que es simpático y tiene un buen carácter.
-¿Quieres quedar esta noche para cenar?
¡Toma ya! Se lo dije. Eso no se lo esperaba, puntaco para mi.
-Por supuesto nena. Dime hora y lugar y te recojo. Pero que quede claro una cosa, yo invito.
- A las 10 en la puerta del hotel Palace, y no.
- ¿Te hospedas allí? Y si.-
Es cabezón el tío, pues ala más cabezona soy yo.
- Sí y no.
- Ya veremos.
Por fin se ha dado por vencido, a cabezona no me gana nadie.
Se acerca a mi, me acaricia la cara y me besa la cabeza.
- Nena, esperaba tu llamada ansioso, no me falles esta noche.
Mi corazón da un vuelco, no esperaba esa confesión por parte de él. Es tan bueno...me da pena hacerle daño. No se lo voy a hacer...¿Qué carajo me creo yo también?
Le sonrío. Me hace sentir cosas que ya sentí tiempo atrás y me da miedo.
Escucho una voz familiar detrás de mi silbando.

- Pero ¿Quién es este bomboncito hija?  ¿No se lo piensas presentar a tu madre?- Se nota que ya lleva un par de copas de más, que pensará Daniel de mi madre... Bueno ya sabe a quien salgo, hace una semana yo estaba igual que ella.
Daniel me mira con gesto gracioso, se ha quedado helado. Yo me río por dentro, pobre chico no sabe lo que le ha caído con esta mujer.
- Mamá, este es daniel, es un amigo.
- Uy hija,este amigo nunca me lo habías presentado. Me gusta tu amigo.
Miro a Daniel, su cara es buenísima, no puedo parar de reír.
Unos chicos se nos acerca y sé que son amigos de Daniel. Éste nos presenta  a sus amigos y veo que mi madre hace migas con uno de ellos.  ¿Pero de verdad que mi madre tienen tanto tirón? Me esta dejando a la altura del betún....Mi propia madre me hunde.
Tras la despedida de Daniel, mi madre, como es ella me intenta sacar toda la información que puede de este chico. Me nombra a Lorenzo y eso me hace enfermar.
- Que le den a Lorenzo y a sus antepasados mamá, no me hables de él.
- Aiiis Amanda-Suspira- Si todavía estas así por lo que te hizo, es porque aún sientes algo.- Sabe que me hizo algo pero no sabe él qué, no se lo he contado.
-Mamá, claro que siento. Siento que sea tan gilipollas, tan imbéncil, tan idiota....
- Hijaaaaaaa...- mi madre me reprende por el tono que estoy usando, no me doy cuenta pero toda la playa esta mirándome y una madre tiene a su hija tapadas las orejas para no escuchar esas palabras tan feas que salen de mi.
Estoy en esa situación de tierra trágame...Me voy corriendo al agua para disimular, paso allí todo el rato hasta que me voy al hotel a prepararme para la cena.

A mi madre le ha venido de lujo porque había quedado con Armando y la pobre no sabia como decírmelo, al final las dos vamos a tener citas. Si es que ya se sabe de donde viene la hija... Y aun ella tiene dudas de si me parezco a ella... ¡Vaya madre!
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Con Daniel es todo maravilloso. Va guapísimo con unas bermudas vaqueras y un camisa que no es ni formal ni informal de color azul marino.
Yo voy vestida con un vestidos hasta los pies, y unas chanclas muy bonitas que las vi en el mercadillo de este pueblo y me gustaron.

- ¡Estas guapísima!- Me dice mientras estamos paseando por la arena de la playa. Esto es demasiado romántico para ser solo un amigo.
-Muchas gracias Daniel, pero tu no quedas atrás.- Le miro y sonrío. Daniel hace que me olvide poco a poco de Lorenzo.
Tengo miedo, miedo de ilusionarme de nuevo y que me la vuelvan a dar. Miedo de que vuelva Lorenzo, y no sepa que hacer, tengo miedo de todo.
- ¿Qué te pasa peque? ¿Estás incómoda?
- No, estoy super cómoda contigo de verdad- Y sin mi más apoyo mi cabeza en su hombro y seguimos andando por la arena mientras vemos la luna reflejada en el agua.

Estamos en silencio, paseando por esas playas. Es todo tan bonito que a veces me imagino que Daniel es Lorenzo y me hundo al mirarle y saber que no es él. Daniel no se merece este trato por mi parte.
-Nena- me da la vuelta y me agarra por la cintura, hace que lo mire a los ojos.- Tengo ganas de besarte- Se acerca a mi boca y me besa.
Nos besamos como si el mañana no existiera, me besa con amor, es un beso muy dulce. Nuestras lenguas se entrelazan una y otra vez saboreando la del otro.
Me coge en brazos  y me lleva cerca de una duna, donde estamos apartados de los locos que están ahora en  el agua. Nos estiramos, hablamos, nos besamos. Me acaricia el pelo mientras estamos estirados viendo las estrellas en el firmamento.
Me giro a su lado y allí esta mirándome, apoyado con una mano su cara enterrando su codo en la arena.
-Eres una nena muy linda- Me dice mientras me da golpecitos en la nariz como si fuera una niña pequeña.
Me trae hacia él y me abraza. Yo le correspondo el abrazo. Es todo tan perfecto...Mis miedos empiezan de nuevo, no quiero seguir por ahí, o acabaremos haciéndolo. Me apetece muchísimo, pero no se merece que lo haga pensando en otro... Soy una idiota. Estoy con un hombre que desearía hacerme el amor y no follarme como otros tantos y yo sufriendo por un gilipollas que me ha mentido y me ha llamado guarra... Me voy a tirar de un puente, me voy a dar un golpe o algo.
-Sabes peque-  logra captar mi atención Daniel.
- Dime- le miro a los ojos. Sus ojos veo que están llorosos. Me pongo nerviosa no se que quiere decirme.
-Me estas haciendo sentir cosas que nunca pensé que volvería a sentir... -
A la mierda, ya tuvo que decir las palabras mágicas. Ahora cualquier cosa que haga puede que le haga daño y me sienta mal. ¡Ay dios mio, ay dios mio! En que lío me meto yo...
Le sonrío
- Tu también me haces sentir cosas Daniel...- Ea, ya esta dicho. Es verdad, Daniel me hace sentir cosas, no como Lorenzo, pero si me esta ganando poco a poco...

Se está acercando lentamente para volver a besarme, me coge de mi cara y empieza a besarme, me toca todo mi cuerpo. Yo estoy igual que él, necesito hacerlo con él, necesito saber que es lo que siento al hacerlo con él.
Noto unas vibraciones por mi cuerpo, por dios mi móvil.... Ahora no.
- Lo siento- Le digo mientras me incorporo. Su cara le delata y su pantalón también. Esta con la libido por las nubes
Cojo mi móvil rápidamente, ¿Qué coño...!
No tengo ni idea de quien es. Es un número desconocido. Un miedo hace contraerme, no me gusta nada esto.
-¿Si?
-Hola, ¿Eres Amanda sparks?- Escucho una voz de una mujer seria.
-Si... ¿Quién es usted?-  Tengo miedo, no la conozco de nada y ella a mi si.
- Perdone, soy Julia, la llamo desde el Hospital de Madrid. Tengo una mala noticia que darte...- Se calla , coge respiración y vuelve a hablar.- Me han dicho que si pasaba algo que la llamara a usted, señora un conocido suyo ha fallecido
¡Ay dios mio, ay dios mio! Estoy nerviosa. ¡Joder, joder, joder!¿Qué coño?
-¿Usted no estará equivocándose?- Mis nervios aumentan.
- No señora
- ¡Ay dios, ay dios! Dime el nombre por favor, dímelo ¡Ya!- Estoy histérica, no se quien carajo es.
- Lorenzo Boccoli Pizzi... Lo siento muchísimo, debe venir a recoger sus cosas en cuanto antes-
¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee?
Mis ojos empiezan a llenarse de lagrimas, Daniel se acerca y me abraza. Yo me quedo callada y suelto el móvil.
Joder, joder joder joder joder, me cago en la ostia puta.
Lloro como si no hubiera final. La lluvia de los 40 días y 40 noches se queda corta a mi lado.
Tengo la barriga descompuesta, tengo nauseas, quiero vomitar. Me siento morir...

Capítulo 9

-Para- dijo con rotundidad.
Intento parar todo esto. No se como he llegado a esto, no quiero hacerlo con él. No quiero. Estoy incomoda. Me siento mal. Me siento mareada, asfixiada, asqueada.
-Para- repito. Intento apartarlo de mi en un empujón.
-¿Qué pasa?- Me dice un poco confundido.
-No puedo hacerlo, lo siento. No es por ti, de verdad.
- ¿Cómo? No me puedes dejar así preciosidad...- Se acerca de nuevo y empieza a besarme.
- Que te quites de encima- le vuelvo a dar un empujón e intento salir del baño.
-Vale, cariño. Pero no te pongas así...
-No me encuentro nada bien- Me siento acalorada y siento muchos mareos.
-Ven,nena siéntate- Me coge por el brazo y me sienta en el inodoro.
Va en busca de agua, se moja las manos, se acerca y me la echa por la cara para que quitarme el agobio.
-Lo siento mucho nena, si hubiera sabido que te encontrabas mal no te hubiera forzado. Lo siento.
Me mira con cara de corderito degollado, de momento se está portando bien por lo tanto lo perdono.
- No pasa nada- le dedico una sonrisa forzada.
-¿Mejor?-
-Si, muchas gracias.
El agobio viene y junto con el los mareos y la fatiga de nuevo. No aguanto más. Vomito al lado de él.
-Nena, estas fatal. Vamos a salir a que te de el aire.
Me ayuda a levantarme y me da la mano para salir juntos del baño. Antes de salir a la calle se acerca a la barra y veo que le indica que limpie el baño y paga mi cuenta junto con la de él. Vuelve a mi lado, me vuelve a coger de la mano y salimos de allí.
-Al fin tienes aire nena.Ven sentémosno allí.
Me hace seña para que siga andando, vamos hacia un parquecito que hay allí, y me invita a sentarme en un banco. Hace un poco de frío.
- Toma mi chaqueta, te protegerá algo del frío.
Cuando se la saca veo su increíble brazo, tiene unos buenos biceps. Joder este chico esta tremendo.
-Muchas gracias.- le miro y me sonríe.
-Sabes, estoy muy cómodo contigo. Esto me pasa pocas veces-
Está sentando a mi lado y me coge por los hombros mientras estira su cabeza encima de la mía. Mi mente me recuerda que me encantaría estar así, pero con Lorenzo.
-¿Intentas ligar conmigo?
Levanta su cara y me mira.
- Oh, señorita, creo que ya he ligado antes con usted.
Rio. Por lo menos este chico me hace reír.
-¿Por qué dijiste que nadie te quería? No me creo eso.
Ha dado en un tema muy jodido. No le tengo porque dar explicaciones pero de la manera que me esta tratando no puedo ser borde con él. Es muy bueno.
- Pues si... nadie me quiere. Bueno si,mi madre pero poco más.
- ¿Te han roto el corazón no?
Exacto ha dado en el clavo. Hago una mueca con mi cara como para decir algo pero me callo.
-He acertado nena. No te preocupes por eso,porque si uno te rompe el corazón, vendrán veinte más que quiera algo contigo. Por ejemplo, Yo. Si no te hubiera visto interesante,no te hubiera entrado.
Le miro a los ojos. Realmente es guapo, y es buena persona.
- ¿Y a ti? ¿Te han roto el corazón?
Rie amargamente.
- A mi no me han roto el corazón, a mi me lo han pisoteado.
-Oh... lo siento.- no pretendía recordarle cosas malas, me siento mal ahora.
Me mira  con gesto gracioso.
- No lo sientas bonita. Es mejor así.- Le sonrio para quitar esa incomoda conversación.
- Estoy muy cómoda contigo, de verdad, pero es tarde y hace frío. Creo que es hora de irme.
- Estoy de acuerdo contigo, además estas mal. ¿Necesitas algo?
- No, muchas gracias.- Me levanto mientras le devuelvo su chaqueta.
- Oh, quédatela, ya me la devolverás otro día que nos veamos.
¿Otro dia? ¿Quiere volverme a ver? ¡Ay dios...! ¿Pero que es esto? ¿Qué me pasa? ¡ Oh dios mio otra vez mariposas en mi no!. ¡Joder, joder, joder!
- Vale.- Le muestro mi mayor sonrisa- Gracias por todo.
- Aún no nena-Se levanta y se pone frente a mi. Me da la mano.-Te acercaré a tu casa, no me fio de dejarte sola
- No tienes porque...-
-Shhh- Me pone el dedo en la boca para que me calle.
-Vamos.- Me coge de la mano y me lleva hasta su coche. Una vez montandos pone el calor en los asientos y le indico donde vivo.
Silba.
- Menudo sitio donde vives bonita.
Rio. es una urbanización muy buena.
-Si, gracias.
Me voy a bajar del coche y el se baja a la vez.
- Te dejo mi movil por si te sigues encontrándote mal y si necesitas algo. Cualquier cosa...
-Amanda, soy Amanda.
Me sonrie. Hemos estado hablando, contándonos cosas y ni siquiera sabemos nuestros nombres.
-Yo soy Daniel, encantando preciosidad.
Su mirada es penetrante y su cara es super atractiva a la par que su cuerpo. Me encanta el moreno que tiene y esa sonrisa me vuelve loca.
- Llámame.- Se acerca y me besa la frente- Adiós preciosidad.
                                                    ----------------------
Abro la puerta de la comunidad y solo veo silencio. No hay nadie más que yo. La oscuridad hace que me vea mas sola aún.  Me encuentro mal. Tengo frío y tengo breves escalofríos en mi cuerpo. El mareo sigue persistiendo. Voy subiendo las escaleras despacio para no hacer ruido. No quiero que me vean  en este estado los curiosos de esta comunidad.  Llego a la puerta de mi apartamento y busco la llave en mi bolso. Me cuesta un rato encontrarla, la cojo y se me cae al suelo. Es lo que me faltaba para saber que hoy  estoy como una completa inútil. Me agacho  a cogerla como puedo, cerrando los ojos. Busco en mi bolso mi movil. Necesito mirarlo antes de nada.
Joder, dos llamadas perdidas de Lorenzo.
-Bellísima...-
Me doy la vuelta rapidamente, y lo veo. Esta ahí, detrás de mi. escondido entre la oscuridad.
-Lorenzo, joder, ¿Qué haces aquí?- Mis ojos empiezan a llenarse de lagrimas.
- Amanda, has bebido...
Se acerca me coje las manos y me las entrelaza mientras me mira a los ojos, intento sostenerle la mirada.
- Eres preciosa, eres para mi Amanda, te quiero, perdóname por favor.
Miro bien a Lorenzo, me quedo callada, con una mirada dura, veo que tiene la barba de unos días y veo que no esta bien, eso me sensibiliza. Me hace darme cuenta que no quiero verlo mal.
Me doy cuenta que si lo he pasado mal ha sido por que lo he querido yo también,,,
-Lorenzo...- Me acerco y nos abrazamos, es un abrazo necesitado, me aprieta tanto que apenas puedo respirar. Noto que con sus manos me toca mi pelo y mi cabeza se la acerca cada vez más a él.
- Amanda, perdón- Me dice en el oido, mientras estamos abrazados.
-Empecemos desde cero, Lorenzo. Todo esta olvidado, pero no mas mentiras ¿Vale?- Me aparto para mirarle a los ojos.
- Te lo juro por mi vida Amanda.
Lo miro a los ojos. Sus ojos dicen la verdad. Es verdad que dicen que los ojos son el espejo del alma.
-Amanda, te voy a contar todo lo que quieras saber solo tienes que preguntar.
- Yo tambien tengo que contarte cosas Lorenzo.
-Bien, entonces empecemos.

Le hago pasar a  mi casa. Lorenzo al pasar se ve feliz. Le hago un amago para que se vaya sentando en el sofa. Caigo en la cuenta que aún no le he preguntado por su hermana.
- ¿Cómo esta tu hermana?
- Esta mucho mejor Amanda, gracias.
Voy a la cocina en busca de algo de comer, supongo que tendrá hambre. Busco en la despensa pero  solo encuentro donuts de chocolate y batido de chocolate.  Los llevo hasta donde está Lorenzo y coge uno mientras me voy sentando a su lado.
- Reina ¿Qué me quieres contar?- Me pregunta con un tono de preocupación y miedo.
- Tu primero Lorenzo, quiero saber porque hiciste eso, porque me lo ocultaste.
- Reina, lo hice por los dos no te queria perder. No queria que te fueras de mi lado. No queria que nada nos separara.- Esta confesión me hace sensibilizarme pero no puedo dejar que crea que lo he perdonado, yo dura.
- Lorenzo me lo tenias que haber dicho que tenias prometida.
- Amanda, ella habia sido mi novia mucho tiempo, de toda la vida y la verdad en cuanto te vi me gustaste pero no creí nunca que sentiria esto por ti. Esto me ha hecho darme cuenta que de verdad no la queria y me di cuenta de lo que si queria, y eras tu. Por muy loco que suene. Solo necesite 3 dias para enamorarme de ti, para que me tuvieras para siempre. Amanda esa relación estaba rota desde antes de que tu llegaras. No te creas que hago esto con todo el mundo. Es la primera vez que lo he hecho. Te quiero, Amanda Sparks.

Lorenzo me ha dejado sin habla. No se como voy a decirle que me he liado hace unas con horas con otro chico. Tengo miedo de que reaccione mal y se vaya, pero no puedo ocultarselo seria hipócrita por mi parte porque si le he estado pidiendo explicaciones de lo de su prometida y ahora yo se lo oculto estariamos en las mismas. Estoy confundida.
- Lorenzo...Yo tambien tengo que contarte algo.
- Dime reina, estoy esperandolo.
Trago saliva y  cierro los ojos cogiendo aire.
-Hace unas horas salí de trabajar y me fui a un pub. Bebí mucho alcohol.- Paro no se como seguir.
- Si, bellísima, se nota que bebiste.
- Se me acerco otro chico y empezamos a hablar.- Su cara cambia por completo. Tiene un rostro de enfado y de curiosidad.
- Si Amanda y que más, ¡dime!- Esta gritando.
- Lorenzo calmate.
- Amanda, ¿Qué más ha pasado, algo más ?
Cierro los ojos, no quiero verle la cara, agacho la cabeza para no verle.
- Nos besamos y me llevo al baño. Empezó a besarme y quiso desnudarme pero le pare los pies. Le dije que parara no quise hacerlo porque pensaba en ti.
Le miro a los ojos. Sus ojos estan rojos, llenos de ira. Esta nervioso  y su expresión es de enfado.
- Amanda ¿Por qué mierda tuviste que hacer eso? ¿Paso algo más? ¿Te hizo algo más?
- No, Lorenzo, no me acoste con él y no paso nada más. Solo le pare los pies y ya está. Me sentí mal y vomite  y me ayudo. Nos sentamos juntos en el parque un rato, estuvimos hablando y me trajo para casa. Y ya ves esa chaqueta de allí es suya.
- Joder, Amanda- Muestra su cabreo- ¿Por que vomitabas?
- Porque me encontraba mal, bebí demasiado, ya te lo dije, si me escucharas...
- Amanda si te estoy escuchando, ¿Por qué mierda te tuviste que liar con ese tío? ¿Por qué no pudiste estarte quietecita?¿ Por qué eres así? ¡Joder!
Se echa las manos a la cara y se que tiene ganas de llorar. Se pone los pelos hacia atras y se levanta. Empieza a dar vueltas en el salon.
- Lorenzo para , ¿Qué te pasa?
- Amanda ¿Que qué me pasa? Dejo todo por ti, vengo volando literalmente de Florencia porque te necesito ver... y tu, estas con otro ¿Y encima tienes la cara de preguntarme que me pasa? Eres increíble...
Sus ojos muestra una dura expresión. Me duele cuando me mira asi.
- Me sentí como el mayor hijo de puta cuando me miraste y me dejaste tirado de esa forma en mi casa y ahora me siento como un idiota por estar aquí contigo, después de lo que me has contado.
- Lorenzo, lo que hiciste tampoco estaba bien.
- Pero Amanda no lo uses de pretexto, no seas necia, la engañe a ella por ti, no te engañe a ti. Tú a mi me has engañado.
- No lorenzo no te he engañado, no estabamos juntos o tu nunca lo dijiste.
Lorenzo muestra una sonrisa de decepción.
- Para mi no significa si estabamos juntos o no, ¿que te crees Amanda?¿ Qué me voy acostando con todas las tias? , ¿Qué las dejo que se metan en mi casa? ¿Qué las dejo que conozca a mi familia? Estas muy,muy equivocada.
Me levanto del sofá e intento acercarme a él para calmarlo.
-Lorenzo ya está, relajemosno.
-Amanda, me voy. Mañana hablamos mejor. Cuídate.
Coge su chaqueta que la dejó encima del sofá, me da un beso en la frente y sale por la puerta.
A la mierda todo... ¿Por qué siempre tengo que cagarla?  Paso mi fria noche en mi cama solitaria, lo único que hago es extrañarlo. Me doy la vuelta de la cama y recuerdo cuando estuvimos juntos, cuando me abrazo, cuando me pone un mechón de pelo detrás de la oreja.
Mis lagrimas empiezan a caer. Los mareos vuelven. Creo que mañana tendréque llamar a mi médica.
Lo primero que hago al levantarme es buscar mi móvil. En busca de alguna noticia de Lorenzo.
Aquí está.
<<  Te espero alas 11 en Alice.<<
Me ha dado una alegría encontrarme con este mensaje. Miro la hora.
Mierda, las 10:45. Vuelo a la ducha y me doy la ducha más rápida jamás vista. Si me llegan a ver los de Record Guinness me ponen en el libro, sin duda.
 Me visto , me pinto y me echo espuma en el pelo. Más rápido imposible. Salgo de mi casa a las once y en punto. Hago mis cálculos, tardaré 10 min en llegar si voy rápido.
Llego a la puerta del Alice asfixiada, cansada y me encuentro hinchada. La regla esta apunto de bajarme. Lo noto por el dolor de pechos.
- Amanda, aquí estas.
Lorenzo me busca hasta la puerta y me acompaña hasta el asiento.
- Tienes mala cara, ¿Has dormido bien?
Parece que lo de ayer se le ha olvidado, ¿Tiene alzheimer o qué?
- No, solo que me encuentro mal, esta tarde quedare con Lluvia para que me haga una revisión.
- ¿Quién es Lluvia?- Pregunta mientras le hace al camarero una señal para que venga a atendernos.
- Es mi médica personal.- Le contesto
- Un capuchino.
- Para mi otro, con mucho azúcar.- Le hago un gesto al camarero para que se cuenta que si quiero mucha azúcar.
- Amanda, con respecto ayer. No puedo olvidarlo, es muy fuerte para mi. No se porque tuviste que hacer algo, estoy decepcionado , joder.- Me mira a los ojos,  aún veo celos en sus ojos por el otro chico.
- Lorenzo... Tu me mentiste primero, joder.
- Amanda, de verdad lo siento muchísimo, necesito pensar.
-¿Qué necesitas pensar? ¿De verdad? ¿A que estas jugando Lorenzo?  Me mientes, y dices que tienes que pensar....
Estoy flipandolo, Lorenzo esta sacándome de mis casillas.
 Bebemos el café nerviosos los dos. No hay más palabras, solo silencio.
- ¿Te gustó ese chico?
- Era mono, y se portó muy bien conmigo. Eso es todo.
- ¿Era muy mono? ¿te gustó Amanda? - No puede contener sus celos, sus ojos estan llenos de furia.
- Amanda, a la mierda. Vete de aquí, de mi lado.
Mi cara esta desencajada, estoy pálida y los calores vuelven a salir.Vuelvo a tener esas nauseas.
- Eres un gilipollas Lorenzo, no sabes cuanto he pasado por ti y mira como me estas tratando.- Mi voz se va roncando cada vez más
- ¿Qué soy un gilipollas, Amanda? Pero si eres una pedazo de guarra que te vas besando por ahí con todos los tios en cuanto me he dado la vuelta... Esto es increíble.
¿Qué? ¿He escuchado bien? ¡¿Me ha dicho guarra?!
- Lorenzo,hasta aquí hemos llegado.  No te permito que me insultes.- Me levanto con el poco café que me queda y se lo tiro encima. Me doy la vuelta y me voy.